Hoy en día el Big Data es un mecanismo indispensable para los grandes negocios y es el activo empresarial más influyente en la transformación digital que se lleva dando en las últimas décadas. El uso de esta información masiva es el núcleo del auge de las multinacionales, es más, cerca el 100% de las empresas líderes mundiales declaran que adoptan proyectos de Big Data para muchas de sus disciplinas, ya que se puede aplicar a muchos de los ámbitos de un negocio.

Pero tan grande es el avance de la tecnología y la conectividad que el Big Data no abarca lo suficiente. Con la aparición del Internet de las Cosas, es decir, la interconexión de los objetos cotidianos pudiendo ser identificados, controlados y gestionados, ha surgido un nuevo término que abarca mucho más en el ámbito de la recogida de datos e información de grandes volúmenes: el Huge Data. El deseo y la necesidad de conseguir una mejor aproximación, una segmentación más precisa y unos resultados más concluyentes por parte de las empresas han hecho que este término sea el nuevo mecanismo de recogida y análisis de datos para los negocios.

Su aparición ha hecho que la mayoría de las empresas se encuentren ahora en una fase de transformación, con el propósito de llegar a adoptar una cultura corporativa orientada a los datos, donde la toma de decisiones pueda realizarse desde un punto más objetivo y más inmediato gracias al alto volumen de elementos inteligentes, al análisis y a la conectividad en tiempo real.

Este nuevo mundo hiperconectado y sobreinformado no solo está provocando cambios en la gestión y mecanismos de las empresas, sino que también ha conllevado a crear una nueva unidad de medida: el Yottabyte. Estando acostumbrados a oír términos como el ‘megabyte’, ‘gigabyte’ o ‘terabyte’, pensamos que no puede haber unidades mayores de medición, pero si las hay siendo el Yottabyte la última y con más volumen. Esta equivaldría a 1024 Zettabytes, que a su vez es el equivalente a 1024 Exabytes, que a su vez congrega 1014 Petabytes; para que nos hagamos una idea, en 2018 todos los datos digitales transmitidos en Internet rondaron los 10 Zettabytes. Por lo tanto, para poder llegar a un solo Yottabyte habría que multiplicar por 100 la cantidad de información manejada en todo el mundo.

Aunque parezca imposible es una cantidad que se alcanzará en un futuro cercano debido al ritmo de evolución tecnológica que tenemos actualmente; las nuevas aportaciones en los productos cotidianos y en nuestro día a día, hace que estemos cada vez más y más conectados. GAME, especialistas en impulsar soluciones tecnológicas en las distintas ramas de las telecomunicaciones.