No hace mucho hacíamos hincapié de los avances que suponían el Wi-Fi 5 o del Wi-Fi 6 en el ámbito de la conectividad inalámbrica. Y es que la tecnología prospera a pasos agigantados. Hoy hablamos de la nueva generación, una promesa de velocidad y eficiencia mejoradas.

Pero, ¿cuáles son las mejoras que presentará?

VELOCIDADES SIN PRECEDENTES

Hablamos de tasas de datos de hasta 46Gpbs, lo que supone un gran salto respecto a sus predecesores. Será casi cuatro veces más rápido que el Wi-Fi y cinco veces más rápido que el Wi-Fi 5.

OPTIMIZACIÓN DE LA CONECTIVIDAD

La mejora de la eficiencia es otro de los beneficios que aportará esta nueva versión, optimizando el empleo de múltiples dispositivos al mismo tiempo. Además, reducirá la latencia significativamente gracias a la implementación de la tecnología de Operación Multi-Link (MLO) que permitirá el intercambio de datos a través de diferentes bandas de radio de forma simultánea.

También contará con una nueva característica llamada Restricted Target Wake Time que permitirá a los routers reservar ancho de banda para los tipos específicos de datos, garantizando de esta manera que ciertas aplicaciones reciban el ancho de banda necesario en un entorno de red abarrotado.

La llegada de esta versión mejorada supondrá una conectividad inalámbrica más eficiente, rápida y que pueda manejar una cantidad creciente de dispositivos sin comprometer el rendimiento de estos. Pero, aunque algunas empresas ya están introduciendo en sus productos soporte para esta nueva era de la conectividad, se espera que el Wi-Fi 7 pueda lanzarse para finales de este año. Lo más probable es que los consumidores no comiencen a beneficiarse de inmediato. Llevará tiempo actualizar la infraestructura de routers compatibles para poder aprovechar al máximo esta nueva tecnología.